lunes, 22 de febrero de 2010

Donde hay oportunidades hoy

Después de la subida de la mayoría de las bolsas del mundo, en especial las de países emergentes, es difícil encontrar oportunidades de inversión muy baratas. Creemos que las mejores oportunidades están en Japón, en las materias primas de agricultura y en las compañías grandes y bien establecidas (los Blue Chips).

La inversión en Japón. En Japón, después de casi 20 años de crisis en los que las familias y las empresas se han dedicado a ahorrar y las valoraciones no han parado de caer, nos encontramos con sociedades que tienen balances extremadamente sólidos a valoraciones ridículamente bajas. Muchas compañías japonesas cumplen los más estrictos criterios de inversión value y ofrecen un buen margen de seguridad.




Materias primas de agricultura. Una de las cuestiones más preocupantes para el inversor es protegerse de la inflación, esto es, la pérdida de poder adquisitivo del dinero. En otro apartado del Blog describimos por qué se produce este fenómeno tan dañino para el ahorrador, pero aquí nos limitamos a exponer una alternativa a tener el dinero en el banco: la inversión en materias primas. Las materias primas conservan su valor intrínseco con independencia de la cantidad de dinero que creen las autoridades monetarias y así, a medida que se imprime dinero, el precio de los materiales sube. No obstante, teniendo en cuenta que el inversor inteligente debe invertir siempre en activos que están baratos, por el momento descartamos la inversión en metales industriales (cobre, aluminio...) y en metales preciosos (oro, plata, platino) porque acumulan una revalorización considerable. A cambio creemos que es preferible invertir en materias primas agriculturales, pues sus precios están en mínimos históricos a la vez que la demanda empieza a crecer más que la producción y los inventarios están en mínimos.



Los Blue Chips: También es recomendable la inversión en las grandes compañías bien establecidas. La mayoría de estas sociedades prestan servicios vitales para la vida en sociedad (energía, comida, productos farmacéuticos, telecomunicaciones....). Están muy baratas: sus valoraciones cayeron tras la crisis de 2008 y no se han recuperado todavía. Sin embargo son compañías que cuentan con muchos recursos técnicos y humanos que les permiten afrontar los problemas de una honda recesión como la que atravesamos con garantías. Además presentan unos balances muy saneados, un perfil de generación de caja estable.



No hay comentarios:

Publicar un comentario